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Qué es un concurso de acreedores y cómo se solicita

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Cuando una empresa tiene problemas económicos, y no es capaz de cubrir sus deudas, puede entrar a lo que se conoce como un concurso de acreedores, o liquidación. Sigue leyendo para que descubras qué es un concurso de acreedores y cómo se solicita.

¿Qué es un concurso de acreedores?

Se trata de un procedimiento judicial que consta de la liquidación de bienes o patrimonio de forma ordenada, y cuidadosamente evaluada, con el fin de extinguir las deudas y la morosidad extrema.

Es usado cuando la empresa no puede cumplir con los pagos que genera su actividad económica, cuando está a punto de perder su capacidad adquisitiva o flujo de caja, o cuando presenta una insolvencia tan alta, que los intereses superan con creces los montos adeudados.

Aunque es una figura creada para abordar casos empresariales y de personas jurídicas, puede cubrir casos de índole personal y de insolvencia de personas físicas. Este procedimiento está ampliamente descrito en la Ley Concursal 22 del 9 de julio de 2003.

Tipos de concurso de acreedores

El concurso puede darse porque uno de los afectados prevea que no podrá cumplir sus obligaciones financieras, o porque la presión de los acreedores lo exija. Cada uno de estos escenarios es diferente, y se clasifican en concurso de tipo voluntario y tipo forzoso, respectivamente. 

De forma voluntaria. 

Dicen que la mejor forma de terminar con los problemas, es enfrentándolos. Y de eso se trata justamente solicitar el concurso de acreedores de forma voluntaria: el representante de la empresa, o su equipo contable, es quien solicita la medida, sin la mediación de externos.

Es importante saber que solicitar de forma voluntaria el proceso es la mejor decisión, cuando se conoce de antemano que los movimientos económicos de la empresa no podrán soportar las cargas financieras a futuro. De esta forma, el proceso puede terminar sin imputarse cargos culposos, que pueden acarrear más problemas.

Forzosa

No faltará quien quiera pasarse de listillo, dándole largas esperas a los acreedores. Utilizar el truco de “mañana te pago” no funcionará por siempre.

Si el deudor, o empresa, no atiende a los llamados de cobro, los acreedores pueden solicitar el concurso de acreedores, haciendo que este se efectúe de manera forzosa.

¿A quién protege el concurso de acreedores?

Este mecanismo intenta ser lo más ecuánime tanto para el deudor, como para el acreedor. Es por ello que no toma parte preferencial de ninguna de las partes.

Su objetivo es hacer que la empresa insolvente pueda seguir operando, en la medida de lo posible, y que los acreedores puedan recuperar el máximo de lo que les corresponde.

Pero, bajo el amparo de la ley, el deudor, también denominado concursado, sí tiene un beneficio especial, y se trata de que sus acreedores no podrán cobrar todos al unísono.

Con la anterior medida se logra que el patrimonio del concursado no se evapore en un abrir y cerrar de ojos, ni que unos cobren más que otros. Además, obtiene el beneficio de que el patrimonio indispensable para mantener las operaciones empresariales no podrá ser liquidado

¿Cuándo solicitar un concurso de acreedores?

Las alarmas deben prenderse cuando la cartera de la empresa, o la situación personal financiera, no puede solventar los compromisos financieros. Específicamente, se toma como un tiempo límite los dos meses de impagos atrasados en nóminas, proveedores, créditos, impuestos, o indemnizaciones.

Plazos para solicitar la declaración de concurso

Plazos para solicitar la declaración de concurso

El tiempo estipulado es de dos meses, una vez que se conoce el estado financiero, y se llega a la conclusión que existe la insolvencia.

Es de tener en cuenta que, una vez se comunica el concurso de acreedores, no pueden darse liquidaciones extrajudiciales o judiciales que obstaculicen la labor o actividad de la empresa. 

¿Quiénes están legitimados para solicitar la declaración del concurso de acreedores?

Como hemos visto, el concurso de acreedores puede ser solicitado tanto por el deudor, como por sus acreedores. Por lo tanto, están legítimamente habilitados quien fuese el representante legal, o quien lleve a cargo la administración contable de la empresa, así como quienes tengan deudas sin saldar, bien sea un proveedor, una entidad externa, estatal, o un prestador de servicios.

Documentos para la solicitud de un concurso de acreedores

Básicamente, lo que se solicitará será la documentación que especifique la situación económica de la empresa, y las deudas adquiridas. Siendo así, se necesitará:

  • Declaración de la situación económica de la empresa
  • Lista de acreedores y tipos de deudas.
  • Inventario de patrimonio de la empresa

Fases del concurso de acreedores

Este proceso puede ser largo y dispendioso, dependiendo de la magnitud de la empresa, y de sus procesos contables. Cada concurso de acreedores consta de una fase común, una de convenio, una de liquidación, y una de calificación.

Fase común

Aquí se da el inicio del concurso de acreedores. Consta de la solicitud, ya sea voluntaria o necesaria (forzosa), y el estudio del caso por parte del juez. Si se aprueba, se procede a estudiar el patrimonio de la empresa, y se clasifican los tipos de deuda activa que se tengan.

Fase de convenio

Esta etapa resulta particularmente importante, ya que es aquí donde se plantean los acuerdos con los acreedores. Estos acuerdos pueden incluir quitas a los intereses, o reestructuración de las deudas. 

Fase de liquidación

Si la etapa anterior no llega a un acuerdo efectivo, entonces se procede a la liquidación de bienes, por parte de un Administrador Concursal, adjudicado por el juez.

El patrimonio, que pueden ser coches, viviendas, bienes inmuebles, u objetos de valor, serán rematados con el fin de pagar la mayor cantidad de deuda posible.

Fase de Calificación

Finalmente, se evalúa el proceso en esta etapa. El juez será quien determine si la insolvencia se dio de forma culposa, o si fue un hecho fortuito. De dictaminar la primera opción, el concursado será sentenciado a indemnizar por daños y perjuicios, además de perder toda posibilidad de administrar bienes en el futuro. 

En conclusión, el concurso de acreedores es un procedimiento jurídico que intenta acabar las deudas de la mejor manera posible, manteniendo a flote, en lo posible, el negocio o industria que lo solicita. Aunque pueden darse liquidaciones de bienes para realizar los pagos, también es posible llegar a acuerdos con los acreedores.

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