Mucho se habla sobre los novedosos tratamientos con células madre, pero poco se dice acerca de cómo se producen. ¿Dónde se obtienen las células madre? Este aspecto es el que te vamos a aclarar en este artículo.
Si no conocías la eficiencia de este tipo de células, podemos decirte que están respaldadas por varios expertos de la comunidad científica. Son varias las investigaciones que confirman la mejora de pacientes que se someten a terapias con células madre, especialmente cuando se trata de enfermedades autoinmunes.
Estas células son el equivalente a la génesis de todos los tejidos del cuerpo humano. Son capaces de replicarse y constituir otro tipo de tejidos, debido a que no son células maduras.
Este simple factor hace que puedan transformarse en tejido nervioso, muscular, óseo y de otros tipos, dándoles una característica particular y única para reparar órganos que pueden estar dañados.
Es por ese gran potencial clínico y terapéutico que cientos de profesionales de la salud han profesado su importancia y recomiendan el uso de estas terapias.
Lamentablemente, también existen individuos poco éticos que prometen curas con el uso de células madre a enfermedades que apenas comienzan investigaciones con este tipo de descubrimientos.
Esa es una de las razones por las cuales te explicaremos aquí cómo se obtienen este tipo de células, ya que cualquier otra manera de conseguirlas puede ser una potencial señal de que no es un método confiable, o que pueda generar efectividad para tratamientos.
Recolección de células madres. ¿De dónde se obtienen?
Dado que este es un tema relativamente reciente y con unas investigaciones aún en desarrollo, son muy puntuales las formas de obtener las células madre con las que se cuentan actualmente.
Las tres formas más conocidas son la extracción de tejido de médula ósea, la extracción de sangre periférica estimulada para recoger células madre y la extracción de tejido o plasma del cordón umbilical.
Médula ósea (MO)
Uno de los lugares con mayor concentración de células madre se halla en la médula ósea de los humanos jóvenes y adultos.
Es en esta zona donde se realiza la generación de glóbulos rojos y blancos, que viajan por la sangre. Por lo tanto, es un lugar donde abundan las células madre.
De hecho, muchos tipos de cáncer de la sangre, como leucemia y sus vertientes, tienen origen en la incorrecta generación de glóbulos.
Si bien en la médula ósea se pueden encontrar células madre con un alto potencial, no son las de mayor calidad, ya que algunas no son propensas a generar tantos tejidos.
Sangre periférica
Algunas células madre pueden ser halladas en la sangre, pero no es el mejor lugar para encontrarlas. Para que puedan ser detectadas, se deben administrar ciertos fármacos que estimulan el crecimiento, algo similar a las hormonas, para que pasen de la médula directamente al sistema circulatorio.
Para extraerlas, se utiliza un catéter, con el cual se recolecta una cantidad determinada de sangre, que será analizada por un dispositivo especializado en separar los glóbulos y plaquetas de las células madre.
Cordón umbilical
Al tratarse de una fecundación, donde las células están en plena ebullición de formación de tejidos, el tejido de los neonatos se establece como el lugar idóneo para extraer muestras de este tipo de células.
Y no sólo es el más idóneo, sino el que tiene la mayor cantidad de células pluripotenciales. Esto es, el tipo de células que pueden desarrollarse con mayor facilidad en cualquier tipo de tejidos.
El cordón umbilical suele ser el órgano con una concentración mayor de este tipo de células, pero también lo es la placenta o la sangre de estos tejidos.
Este líquido plasmático del cordón umbilical puede ser congelado, para usarse posteriormente en un paciente que lo necesite para la generación de células madre.
A pesar de ser el sitio donde se hallan las células madre de mejor calidad y potencial, el cordón umbilical se caracteriza por no tener tanto líquido plasmático del cual se pueda recolectar. Es decir, se halla mejor calidad, pero menor cantidad.
La aféresis: proceso de donación de células madre
Gracias a la ayuda de donantes, cientos de personas pueden recibir un tratamiento oportuno a enfermedades tan destructivas como el cáncer.
Las donaciones de células madre pueden realizarse básicamente por medio de dos procedimientos: la donación de tejido de médula ósea o la donación de sangre periférica estimulada con fármacos.
Para el primer caso, la donación de tejido de médula ósea, se requiere de una cirugía con anestesia general. El donante puede presentar algunos síntomas secundarios, como dificultad para caminar durante unos días, o una leve sensación de fatiga, pero todos los efectos desaparecen por completo al cabo de dos semanas.
El segundo caso, la donación de sangre periférica, tiene un margen de riesgo mucho más mínimo. Aquí el paciente es estimulado con sustancias que elevan la producción de células madre en la médula ósea, la cual los libera a la sangre.
Después, son extraídas por un proceso muy similar a una transfusión. Se pueden presentar leves efectos secundarios, como leves mareos, dolores musculares y fatiga. Pero son síntomas que desaparecen al cabo de pocos días y no representan un peligro para la salud del donante.
En conclusión, las células madre son la nueva apuesta de la medicina para tratar muchas enfermedades, aunque su obtención sea todo un reto todavía. Si bien las mejores se encuentran en los tejidos de recién nacidos, también es posible encontrarlas en donantes adultos.
¿Deseas conocer más de este tema? Con gusto resolveremos tus inquietudes, sobre tratamientos y centros donde puedes buscar atención y terapias basadas en células madre.