Iker Casillas aseguró sus manos por cerca de 8 millones de euros en el 2007. Una cifra que, aunque parece exorbitante, no lo es tanto, si tenemos en cuenta que eran las partes del cuerpo más preciadas para este ex portero. Si lo piensas bien, tu propio bienestar es un elemento de alto valor también y debería asegurarse. Para que lo tengas más claro, aquí te explicaremos cómo funciona el seguro de vida y por qué deberías contratar uno.
Estos productos, ofertados por las aseguradoras, se encargan de asistir a sus clientes en caso de que ocurra una calamidad, como un accidente grave que provoque la invalidez del titular.
Por otra parte, brindan un bienestar a largo plazo, ya que, de presentarse una situación tan compleja como la muerte del tomador de la póliza, pueden asistir a la familia de forma monetaria. Es, en resumidas cuentas, asegurar el futuro de la familia.
¿Qué beneficios tiene pagar un seguro de vida?
Vivir en la sociedad actual implica una serie de riesgos, a los cuales estamos expuestos diariamente, pero que pasamos por alto: riesgos de tipo laboral, accidentes de tránsito o enfermedades degenerativas que van haciendo de las suyas.
Todas estas situaciones generan gran preocupación entre los ciudadanos españoles, especialmente cuando tienen familia, o hijos bajo su responsabilidad.
¿Qué pasaría si, por ejemplo, se pierde la capacidad de trabajo por un desafortunado accidente? ¿Quién pagaría los gastos en caso de que se sufra una invalidez permanente?
Para evitar todas estas preocupaciones, existen los seguros de vida. Se trata de pólizas que actúan cuando ocurre alguna de las situaciones descritas, cubriendo económicamente al núcleo familiar del titular.
Son especialmente útiles cuando el asegurado tiene personas bajo su cargo, que dependen económicamente de su labor u oficio.
Por lo anterior, los beneficios de tener un seguro son, especialmente, el de respaldar a los hijos o cónyuge en caso de deceso o lesión grave. Además, muchos seguros dan la posibilidad de ahorrar para pagar los estudios, la hipoteca o aumentar la pensión.
Tipos de seguros de vida
¿Qué es lo que cubre el seguro de vida?
Por lo general, los seguros de vida cubren la muerte súbita, la invalidez parcial o permanente y las enfermedades crónicas.
Gracias a los seguros de vida, es posible cubrir gastos tan importantes como las hipotecas, el estudio futuro de los hijos o imprevistos.
Aunque puede haber varias categorías, cada una con sus planes y beneficios, podemos agrupar globalmente dos tipos: los seguros de vida a término, y los seguros de vida permanentes.
¿Qué es el seguro de vida a término?
Su nombre ya nos da varias pistas: este tipo de seguro tiene la característica de tener un tiempo determinado de cobertura.
Los periodos suelen ser muy variados y dependerán de las necesidades puntuales de cada cliente. Por ello, las aseguradoras ofrecen planes que pueden durar desde un año, hasta 30 años en total.
Características del seguro de vida a término
Al ser seguros de vida con un tiempo límite, se centran en aspectos muy específicos, como cubrir una determinada necesidad o situación.
Tienen una ventaja particular de ser fácilmente intercambiables por un seguro permanente, dado que, al ya tener una cobertura, no es necesario empezar todo el papeleo desde cero. ¡Es un gran ahorro de tiempo, ya que no será necesario presentar un nuevo examen médico!
¿Qué es el seguro de vida permanente?
Nuevamente, no es difícil sospechar de qué se trata, dado su nombre. El seguro permanente tiene una cobertura total hasta el deceso del titular, o hasta que cumpla la edad límite que estipule la aseguradora.
Este tipo de seguros permite generar un ahorro a lo largo de la vida, que puede ser reclamado al final de la cobertura, o puede dejarse como un dinero destinado a ser heredado por los hijos.
Es importante resaltar que el rescate de esta suma dineraria implica un cobro de impuestos. Por tal motivo, se recomienda no cobrarlo todo en un único pago, sino recibirlo como una renta mensual.
Un aspecto en el que difiere con los seguros a término, es que las cuotas son más altas. Esto se explica debido a que la cobertura es por más tiempo y se puede generar un ahorro.
Tipos de seguro de vida permanente
Las dos categorías más importantes de los seguros de vida permanentes son los ordinarios o tradicionales y los universales.
En los seguros ordinarios, la póliza estará vigente mientras se paguen las primas, o en tanto se esté dentro del rango de edad de cobertura.
Es característico de estos seguros generar cierta rentabilidad, aunque pequeña, por el dinero que se guarda como ahorro.
En el seguro de tipo universal, las cuotas de las primas se regirán por la edad en la que se tome la póliza: a mayor edad, mayor será el pago a realizar.
Adicionalmente, presentan una flexibilidad mayor en cuanto a las coberturas. Es decir, se pueden implementar más beneficios, modificarlos, o cambiarlos, de acuerdo a las posibilidades del cliente, y sus necesidades.
¿Cuándo se paga el seguro de vida?
Cada aseguradora establece unos periodos de tiempo para las primas, aunque lo más común es que estas sean mensuales.
En algunos casos, se puede dar un pago único. Esto ocurre cuando el tomador lo hace a una edad avanzada, ya que no tendría sentido pagar mes a mes.
También existen pólizas que difieren el pago cada año, aunque esto debe acordarse con el cliente, y depende mucho del tipo de cobertura que se va a tomar.
Cerrando este tema, los seguros de vida son un alivio para suprimir las preocupaciones, que surgen al pensar en el futuro de la familia y de los hijos. Aunque la mayoría cubre accidentes y fallecimiento, también pueden presentar otros beneficios, como la posibilidad de ahorrar.
La mejor forma de prepararse para el futuro, es creando desde este instante el presente. Por eso, ¡toma un buen seguro hoy! En nuestro comparador, podrás encontrar las mejores ofertas.