informacionalconsumidor.org

¿Cuáles son los requisitos para ser considerado deudor de buena fe?

Tabla de contenidos
¿Sabes cuáles son los requisitos para ser considerado deudor de buena fe? Descubre en nuestro post cómo se relaciona con la Ley de Segunda Oportunidad.

¿Tienes deudas y, aunque trates de cubrirlas, no tienes la capacidad de hacerlo? ¿Las alternativas que has buscado no te han ayudado mucho y, mientras más días pasan, más crece tu obligación con los acreedores? ¡Tranquilo! Hay una manera de que te perdonen tus deudas, pero deberás cumplir con los requisitos para ser considerado deudor de buena fe.

¿Qué se considera «buena fe»?

El artículo 7 del Código Civil menciona la buena fe como un requisito en el ejercicio de los derechos, por lo que es contrario al abuso de estos. Por ello se considera que el concepto se refiere a una actuación basada en la rectitud, la honradez y la veracidad. 

Definición de deudor de buena fe 

Un deudor de buena fe es quien cayó en insolvencia por una situación fortuita y no por engaños o malos comportamientos y quien, además, se presenta al concurso de acreedores sin ser declarado culpable.

Antecedentes 

Para ser catalogado como deudor de buena fe, el individuo no puede tener antecedentes penales con condena en firme en los 10 años anteriores a la declaración del concurso de acreedores, en los delitos de falsedad de documentos, contra Hacienda, el patrimonio, la Seguridad Social y el orden socioeconómico o delitos contra los derechos de los trabajadores.

Acuerdo extrajudicial de pagos 

Para dar paso a la exoneración de deudas el deudor tiene que haber intentado o celebrado un acuerdo extrajudicial de pagos. Si lo logró, se refinancia la deuda. 

Aunque no siempre se llega a un acuerdo, el solo hecho de que hayas manifestado tu interés en hacerlo ya es otro motivo para creer que podrías ser deudor de buena fe y que posiblemente seas apto para acogerte a la Ley de Segunda Oportunidad

Ley Concursal 

La Ley Concursal establece los requisitos para ser considerado deudor de buena fe, específicamente el artículo 84, en el que se determina que se ha cumplido con los créditos contra la masa, o sea, los costes generados con la declaración del concurso de acreedores. 

Además, es necesario que se haya cumplido con los créditos concursales privilegiados, es decir, los que tienen prioridad dentro de las deudas, al menos en un 25 % de su valor. 

Lo anterior le dará luces al juzgado de la buena fe del deudor, pues ha demostrado que se ha hecho cargo de los costes que surgen con el concurso (como los de la contratación de un mediador) y de su intención de responder al proceso. 

Ley Concursal 

No obstante, si no se cumple con esas condiciones, el juez necesitará que te sometas a un plan de pagos sujeto a su aprobación, que colabores con él y la administración concursal y que no te hayas sometido a la Ley de Segunda Oportunidad en los 5 años anteriores.

Asimismo, aparecerás durante los siguientes  cinco años en el Registro Público Concursal, de acuerdo con la aceptación de esta condición que figura en la solicitud de la exoneración del pasivo insatisfecho. 

Diferencias entre deudor de buena fe y deudor de mala fe 

Las diferencias entre los deudores de buena fe y los de mala fe son claras y están directamente relacionadas con los requisitos para comprobar que perteneces o no al primer grupo. 

Los deudores de mala fe han usado engaños y artimañas para entorpecer el proceso de reclamación de la deuda. Por ejemplo, ocultando su patrimonio y bienes para que no se los embarguen o intentando declararse insolventes cuando tienen los recursos para responder por su obligación. 

También se considera que eres un deudor de mala fe si has sido declarado culpable de delitos como falsedad de documentos o contra el patrimonio y los trabajadores, como te contamos más arriba. 

Condiciones para ser considerado un deudor de buena fe 

Para que seas considerado deudor de buena fe y puedas acogerte a la Ley de Segunda Oportunidad (que te detallaremos más abajo) debes cumplir con las siguientes condiciones: 

  • Aportar la documentación necesaria sobre tus bienes, pasivos, activos, deudas y patrimonio en general. 
  • Si tu situación económica cambia, debes comunicarlo.
  • Que no te hayan declarado culpable en el concurso de acreedores. 
  • No solicitar más préstamos ni hacer movimientos de tus bienes, lo cual solo tienes permitido con la autorización del juez. 

Deudor de buena fe y Ley de Segunda Oportunidad

La Ley de Segunda Oportunidad aplica para personas físicas insolventes que sean consideradas deudoras de buena fe y que tengan dos o más deudas pendientes (no mayores a los cinco millones de euros).

Recuerda que no puedes haber sido declarado culpable en delitos contra los trabajadores y el patrimonio; además,  el concurso de acreedores tendrá que haber sido fortuito, sin utilizar  engaños o esconder  bienes para no responder por tus obligaciones. 

En el mismo sentido, tuviste que haber intentado un acuerdo extrajudicial de pagos y  haber cubierto los costes del concurso. Si aún tienes dudas ¡escríbenos! Tenemos la información que necesitas para acogerte a la Ley de Segunda Oportunidad.

¿De cuánta utilidad te ha parecido este contenido?

¡Haz clic en una estrella para puntuarlo!

Promedio de puntuación 5 / 5. Recuento de votos: 1

Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este contenido.